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Título: Los príncipes azules también destiñen
Autora: Megan Maxwell
Editorial: Ediciones Versátil
Páginas: 424
ISBN: 9788492929641
Publicación: 2012
Género: Romántica
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¿Existen las segundas oportunidades en el amor?
Adéntrate en la historia de Sam y Kate, de Michael y Terry, un cuento de hadas que se convierte en una pesadilla, una pesadilla que se convierte en un cuento de hadas, dos amantes destinados a reencontrarse a pesar de las trabas que les impone la vida. Una novela en la que los príncipes azules destiñen, pero las princesas también… ¿Te atreves a descubrirla?
Truño. Esa es la palabra con la que empiezo la reseña y con la que resumo una historia de muy bien anunciada pero que defrauda de manera estrepitosa. Sé que Maxwell es una de las autoras favoritas de muchos de mis lectores y que a otros tantos este libro les ha encantado, pero en mi caso tengo que reconocer que la autora cada día me llena menos y que el libro no me ha aportado nada de nada. Me explico:
Sam es hawaiano y Kate de Nueva York. Se conocieron cuando iban a la universidad y como toda historia perfecta se gustaron y acabaron casados y super felices. Tienen dos hijas y viven con la madre de Kate, aunque la hermana de ésta y el ''hermano'' adoptivo de Sam también se pasan por la casa a menudo. Todo parece perfecto pero de repente nos encontramos con que estamos en otro escenario totalmente distinto en el que hay otro Sam pero con otra mujer y otros niños.
Sam es hawaiano y Kate de Nueva York. Se conocieron cuando iban a la universidad y como toda historia perfecta se gustaron y acabaron casados y super felices. Tienen dos hijas y viven con la madre de Kate, aunque la hermana de ésta y el ''hermano'' adoptivo de Sam también se pasan por la casa a menudo. Todo parece perfecto pero de repente nos encontramos con que estamos en otro escenario totalmente distinto en el que hay otro Sam pero con otra mujer y otros niños.
"¿Qué pasa aquí? -Nos preguntamos- ¿Le faltan páginas a mi libro?"
Tranquilos, no es eso. Después de muchas páginas y muchos nombres que no hacen más que hacer que nos perdamos nos acabamos dando cuenta de que Sam, el marido perfecto, tiene otra familia a espaldas de su mujer. (En este momento lo único que pasaba por mi cabeza era: ¡qué cabrón! y mucho odio).
Al final nos encontramos dando vueltas en una historia contada de manera bastante pobre en la que nos tiramos cientos de páginas esperando a que Sam y Kate se reconcilien. Un 'ahora sí, ahora no' continuo que acaba cansándonos y dándonos ganas de matar a algún que otro personaje. Tenemos un par de historias secundarias en las que el hermano de Sam (Michael) y la hermana de Kate (Terry) intentan hacer su propia historia de amor pero que tampoco llega a convencer mucho y la historia de cómo Michael se embarca en la búsqueda de su familia biológica (esta parte sí es bastante interesante aunque nos desvía bastante del tema principal de la novela).
Pero ¿habrá algo que te guste? Sí. Me gusta que Maxwell se haya atrevido con un tema tan delicado como la infidelidad, llevándola a extremos tan fuertes y tratándola con delicadeza. Nos hace ver que todos cometemos errores, que no todo lo que reluce es oro, que hay que luchar por lo que se quiere y que a veces las segundas oportunidades son necesarias. Además nos ofrece muchas información sobre Hawai y otras islas de interés. Maxwell se ha trabajado mucho los aspectos turísticos, los paisajes, las comidas típicas, la historia y las tradiciones. La felicito por ese trabajo de investigación. La verdad es que según iba leyendo más me apetecía irme de vacaciones a alguna isla tropical. Y si a eso le sumamos que me recordaba a la canción de 'Under the coconut tree' de Mohombi apaga y vámonos.

En definitiva a mí la historia no me ha dado mucho más. No lo pondría entre lo peor que he leído este año ni mucho menos porque me reí bastante y de lo malo conseguí identificarme con algún personaje del libro y sentir alegría o furia según iba pasando las páginas (conseguí meterme en la historia) pero en mi opinión más de 100 páginas sobraban totalmente y, si hubiera escrito yo este libro, con respecto a lo de las segundas oportunidades... otro gallo cantaría.